martes, 6 de noviembre de 2007

Introducción

1) Es oficial: El Hotel Savoy cerró sus puertas

Hace dos años, por recomendación de mi bróder Guillermo Vega Zaragoza, tras un concienzudo exámen de conciencia me miré al espejo y me dije a mí mismo “¿porqué no?” y subí al internet un blog: El Club Privado de los Dandys del Infierno, que a la larga terminó llamándose Hotel Savoy. La idea del primer nombre se debe a que en un principio tuve la intención de hacer un blog colectivo donde escribieran otros valedores. Todos ellos y yo formaríamos dicho club privado, dónde los héroes serían Oscar Wilde, Edgar Allan Poe, los Charles, Baudelaire y Bukowski, y demás fauna nociva, escritores (como los ya mencionados) o músicos decadentes (Nick Cave, Joaquín Sabina, Bowie y Agustín Lara). Con el paso de los días desistí de ese empeño y el blog se convirtió en mi bitácora personal.

Ahora bien, como sabrán algunos, el Hotel Savoy es dónde el buen Wilde pasó muchos de sus mejores reventones y bacanales, hasta que sus santos huesos fueron a dar a la cárcel, donde asesinaron su lujuria por la vida. Así, a manera de homenaje al santo patrono de los dandys, decidí usar ese nombre. Lo que muy pocos saben, es que en la calle dónde crecí, en la colonia Guerrero, hay también un hotel Savoy, dónde vivían (y viven) muchas de las putas que recorren el amado barrio que fue testigo de cómo me eché a perder. La casualidad me encantó, así que opté por ese nombre ya que resumía la manera en cómo yo me concebía: un dandy del arrabal.

Así comencé a conocer el mundillo de los blogs, y no me puedo quejar, durante un tiempo mi bitácora recibía muchas visitas y comentarios. En un principio quise escribir sobre literatura y música, pero poco a poco fui escribiendo (que no hablando) de todo. Incluso ventilé intimidades, así como mis aventuras más chacalescas (que no son pocas). Pero bueno, como diría aquella canción “así es la vida, todo tiene un principio y un fin”, he decidido clausurar mi Hotel Savoy para abrir este nuevo espacio.

¿Las razones? No lo se, de algún modo dejó de divertirme. Y por otro lado, muchas de las circunstancias personales que caminaban de la mano con ese proyecto fueron terminando poco a poco.

En fin, el caso es que ahora se inaugura este espacio, RF. No se aún si realmente habrá diferencias entre este blog y el que acabo de clausurar. Lo que si se es que en estos dos años yo he cambiado bastante, supongo que para mal, o para bien, todo depende de la perspectiva.

Hechas ya las aclaraciones debidas, me permito inaugurar este blog. Compermiso.


2) Apuntes sobre la ingeniería de RF para los viejos lectores del Hotel Savoy
  • Como no estamos en el Hotel Savoy, aquí ya no firmaré como el Dandy del Infierno. Y es que debo confesar que ni soy tan dandy, ni tan infernal.
  • Desaparece el cbox. Cualquier comentario, favor de usar los canales correspondientes. Lo anterior parece muy mamón –lo es-, pero creo que no vale la pena tener ese recurso y meterle ruido visual a al blog, que de por sí ya está muy cargado. Las encuestas –por el momento- no serán parte del blog. Cuando se hayan cumplido las visitas suficientes consideraré su regreso.
  • Desaparece también la dandychica del mes, pero aparece la musa del mes. La dandychica era más elegante, pero la musa es más sexy.
  • ¡Tenemos radio!
  • Prometo mejorar los pies de página y las noticias falsas, que en su momento, fueron la delicia de chicos y grandes.
  • Como mínimo, se recomendará un libro a la semana, y ya no será Trainspotting.
  • Las epígrafes se actualizarán periódicamente, y dejaré descansar a Oscar Wilde, Ian Curtis y San José (Alfredo) por un buen tiempo.
  • El actual blog no se hace responsable de las promesas que no cumplí en el anterior, es decir, los libros y los pomos que ofrecí en mis trivias.
  • Así mismo, desaparecen mis cuentos y mis poemas, todo aquello que pertenezca a mi creación literaria se leerá en papel exclusivamente. Pero habrá más textos de verdadera literatura.


3) Como éste:

ELLOS Y NOSOTROS


estaban todos en el porche
charlando: Hemingway, Faulkner, T. S. Elliot,
Ezra Pound, Samsum, Wally Stevens,
e. e. cummings y algunos más.

“escucha”, dijo mi madre, “¿no puedes
decirles que se callen?”

“no”, dije.

“estan diciendo tonterías” dijo mi
madre, “deberían buscar
trabajo”.

“ya tienen trabajo”,
dije.

“sí, mucho…”, dijo mi
padre.

“exactamente”,
dije.

entonces Faulkner entró dando tumbos.
encontró el whisky en la
alacena y salió con
él.


“una persona terrible”,
dijo mi madre.
luego se levantó y echó un vistazo
al porche.

“hay una mujer con ellos”,
dijo, “pero parece un
hombre”.

“es Gertrude”,
dije.

“hay otro tío que está luciendo
los músculos”, dijo, “dice que
puede cargarse a tres cualesquiera
de ellos”.

“es Ernie”, dije.

“y éste”, me señaló mi padre con el dedo,
“¡quiere ser como ellos”.

“¿de verdad?”, preguntó mi madre.

“no como ellos”, dije, “sino uno de
ellos”.

“consigue un jodido trabajo”,
dijo mi padre.

“cállate”, dije.

“¿qué?”

“he dicho que te calles; estoy escuchando a
esos hombres”.

mi padre miró a su mujer:
“¡éste no es hijo
mío!”

“espero que no”, dije.

Faulkner volvió a entrar dando tumbos en la
habitación.

“¿dónde está el teléfono?”,
preguntó.

“¿para qué demonios lo quiere?”, preguntó
mi padre.

“Ernie se acaba de volar los
sesos”, dijo.

“¿ves lo que les pasa a las personas
así?”, gritó mi padre.

me levanté
despacio
y ayudé a Bill a encontrar
el
teléfono.

Charles Bukowsi

De Poemas de la última noche en la tierra, DVD ediciones, Barcelona 2006.

1 comentario:

Guillermo Vega Zaragoza dijo...

Ah, qué licenciado tan inestable!

Pero está bien, renovarse o morir!!!

Te debo la visita al Atrio, es que he andado en chinga, pero la próxima semana tenemos que ir al Cova, eso que ni qué.

Un abrazo fraterno.

El Vega.com